viernes, 25 de noviembre de 2011

¿REYES DE EUROPA?

Buenos y tensos días,

Tengo la sensación de que estamos en un momento caliente y crucial de la temporada y, por lo menos yo, empiezo a sentir ciertos nervios porque un título podría estar cerca de decidirse.

El título de esta entrada viene de una frase que empecé a acuñar con frecuencia hace algo más de un año.

Obviamente, me refería entonces a mi Real Madrid, y lo decía en broma, en cierta forma, porque seguía viendo al Barça por encima (igual que ahora… ) pero me encantaba la evolución de los de Concha Espina que estaba observando en esas fechas y soy de los que les gusta disfrutar los buenos momentos, duren lo que duren.

Lo que me gustó en el mes de Octubre de 2010 es que el Madrid había sumado toque y posesión al fútbol directo que se le presumía, y ciertamente tenía, dadas las características de su plantilla. Así vimos las goleadas al Deportivo en el Bernabéu y al Málaga en La Rosaleda como el empate en San Siro ante el AC Milán, con dominio, buen juego y robo arbitral (enésimo).

Celebraba asimismo que en su tercer mes, el tito Mou, hubiera conseguido llegar a eso después de una pretemporada y mes de septiembre bastante insulsos.

Llegó Noviembre y seguí viendo a ese equipo arrollador pero sólo unos minutos en cada partido. Eso empezó a preocuparme. Así llegaron las victorias en casa ante el Atlético de Madrid y el Athletic de Bilbao. 30 primeros minutos arrolladores, ventaja en el marcador y a dormir. Líneas retrasadas y a especular con el resultado.

A mucha gente no le parecerá del todo malo y, desde luego, no sorprendente conociendo a Yosé.

Nuestro Míster portugués se siente cómodo defendiendo y lo prepara bien. Es lo que él llama el bloque bajo, que también hay que saber ponerlo en práctica y sus equipos siempre lo han hecho excelentemente (de hecho, mejor que el bloque medio y el alto, seguramente). Es otro recurso, más variedad táctica para tu equipo pero a veces puede traerte problemas.

Llegó el 29 de Noviembre y la debacle en el Camp Nou. Eso desestabilizó completamente al Madrid que no recuperó el nivel de Octubre en toda la temporada salvo en ocasiones puntuales.

Hace poco había recuperado la frase “Reyes de Europa”. ¿Por qué? Porque mandamos en Europa, mandamos en España y porque seguimos perfeccionando nuestro estilo, a día de hoy, ecléctico, donde hay sitio para la presión asfixiante al contrario en su campo, hueco para el orden y la concentración extrema de un bloque bajo que defiende su portería, altar para el mejor desempeño del contragolpe que probablemente haya visto jamás y lo que es más esperanzador, invitación a unirse a nuestro libro de recursos al fútbol de toque con siete u ocho jugadores en línea o por delante del balón y paredes cortas, precisas y preciosistas donde el espacio se acaba.

Ese nivel futbolístico que hemos alcanzado, una vuelta de tuerca más sobre la versión anterior, la mayor longitud de la plantilla y el recuerdo de nuestra evolución en la sucesión de clásicos, de abril a agosto, que acabó con una brillante actuación en la Supercopa, a mi parecer, me elevaban a un estado de euforia que con los tres puntos de margen que tenemos en Liga me hacían albergar esperanzas importantes de conquistar el título doméstico y acabar con la hegemonía blaugrana.

¿Ha terminado esa euforia? ¿Y las esperanzas? No. Creo que estamos muy cerca y que podemos derribar al Barcelona pero en Valencia vi los síntomas del mes de Noviembre de 2010.

Marcó rápido Benzemá y por lo menos desde el minuto 30 (y son más de 60 de juego), estuvimos esperando en nuestro campo dominados en posesión por los chés.

Cierto que la posesión de los de Emery fue estéril hasta casi el final (maestría en el desempeño del bloque bajo) pero les permitió seguir vivos en el encuentro y cuando se encontraron con el inaceptable despiste de Marcelo si nos pusieron en problemas y pudieron habernos quitado dos puntos clave para el devenir de la Liga.

Mañana llega el derbi con el Atleti. Nadie confía en los colchoneros pero en algún momento volverán a dar batalla ¿Por qué no mañana? ¿Si el Madrid se confía? ¿Si el Real especula?

No es que me preocupe el Atlético más que el Sevilla en el Pizjuan, es que me preocupan todos hasta que llegue el Barça. Una ventaja de tres puntos obtenida después de 12 jornadas y habiendo pasado por Mestalla es una diferencia a cuidar porque muy pronto podría ser definitiva.

El Madrid tiene que llegar al clásico con tres puntos como poco y allí ganar.

Hay que dar un golpe en la mesa, hay que transmitir un mensaje y hay que ganar una Liga.

Desde la 2000-01 vengo diciendo que cuatro puntos o más al llegar la Navidad son definitivos (¡con más de media temporada por delante!). Si no me equivoco, sólo no se ha cumplido en la 2006-07 en la gran remontada del Madrid de Fabio “fútbol” Capello.

Si el Madrid gana “El Partido” (y supera con ello los tres puntos de ventaja), habrá ganado la Liga (quedaros con ese pronóstico). ¿Entendéis ahora mis nervios? ¿Mi inquietud?

Está llegando lo bueno, la temporada se está calentando, llegan los momentos en los que las estrellas tienen que estar, en los que los equipos tienen que mandar, demostrar su personalidad y su alma. En los que se forjan leyendas.

No es exageración, estamos frente a la gran batalla futbolística en mucho tiempo; F. C. Barcelona – Real Madrid y sólo puede quedar uno.

Lo mejor, que parece que puede que esta vez seamos nosotros…

Un abrazo a todos, futboleros, y feliz derbi.