viernes, 16 de julio de 2010

EL FÚTBOL ES NUESTRO

¡¡¡CAMPEOOOONES!!! ¡¡¡CAMPEOOOONES!!! ¡¡¡OEE!!! ¡¡¡OEE!!! ¡¡¡OEE!!!

¡Menudo subidón amigos! Nuestros mejores deseos fueron superados este domingo con una victoria espectacular, emocionante y de mucho significado.

He de reconocer que mi vocabulario es completamente insuficiente para calificar la magnitud del logro de nuestra selección y la euforia que viví el domingo y que sigo viviendo ahora porque esto me va a durar tiempo, bueno, toda mi vida.

Había vivido otros grandes triunfos del Real Madrid, algunos esperados desde mucho tiempo atrás, pero nunca de la misma manera que este triunfo de la roja.

El mundial es el torneo de los torneos. Siempre he pensado que en él las estrellas se convierten en jugadores de verdad. La intensidad de todos los equipos es inigualable, participan todos, de todos los países y todos con hambre de gloria. La oportunidad sólo llega una vez cada cuatro años y por eso la presión, y la recompensa, no tienen comparación alguna en este deporte.

En ese escenario España ha demostrado ser grande. Llegaba como favorita por ser campeona de Europa y ha sufrido la presión añadida de la derrota en el primer partido pero ha ido creciendo en su juego, recuperando su estilo de 2008 y, sobre todo, ha ganado. No ha fallado, ha dado la talla en el gran momento.

Centrándonos en la final, el comienzo español fue muy bueno con 15 minutos de presión y dominio, una vez más, malgastados. Después de ese periodo Holanda empezó a equilibrar el partido.

No porque se hiciera con el dominio sino porque enfrío el de España, teníamos un poco menos el balón, jugábamos más lento y no llegábamos pero ellos hacían poco realmente salvo patear a nuestros jugadores.

Los minutos pasaban angustiosamente para mí, para todos, ya que cuanto más se acercaba el final menos margen de maniobra y de error quedaban. Un gol en contra lo hubiera hecho casi imposible y yo me estaba poniendo enfermo.

España recuperó el peligro en la prórroga. Con Cesc en el campo y ante una defensa más cansada empezaron a llegar ocasiones por donde se supone que es más difícil, por el centro, pero nuestra gran carencia, el remate, nos impidió cerrar el partido antes y la ansiedad siguió aumentando.

Anticipé la semana pasada que para mí el partido tenía un atractivo especial por enfrentarnos a dos ex-madridistas.

La satisfacción ha sido doble ya que ganando a esos marrulleros y navajeros vestidos de naranja han caído también en el botín Van Bommel, uno de los emblemas del antifútbol y Snejder y Robben, sobrevalorados, lloricas y menores.

Robben, peligroso y activo todo el partido, no pudo superar en la banda la defensa de ayudas española ni encontrar a ningún compañero desmarcado gracias a esas ayudas. Cuando buscó hacer daño en el centro con su velocidad fracasó hasta dos veces en el momento en el que los cracks tienen que marcar la diferencia. Sus quejas al final sólo pueden justificarse por su impotencia pero no puede estar contento con su actuación.

El caso de Snejder es especialmente risible. Se vio lo que había visto en el Bernabéu tantas veces: un jugador mediocre, que no es una estrella, que sólo sabe sacar a balón parado y chutar desde lejos. En su desesperación intentó batir, hasta en dos ocasiones, a Iker desde 40 metros, ridículo. Eso fue todo lo que pudo ofrecer, ni regates ni pases (sólo uno) pero si bastantes faltas y unas declaraciones absurdas al término del partido.

La española ha sido una victoria de estilo, de justicia y muy buena para el fútbol ya que un equipo que pretende jugar y juega, que tiene paciencia y deportividad se ha visto recompensado frente a otro que hizo un planteamiento más que defensivo, violento. Inadmisible e ilegítimo.

Aparte del gol, para mí, el momento cumbre llegó en el minuto 61. Pase de Wes y desmarque de Robben. Desde que Arjen inicia el movimiento comienza una secuencia que duró segundos pero que se me hizo eterna y quizá también al holandés.

Robben recibe solo, sin nadie cerca, con mucho espacio y el mejor portero del mundo (vuelve a serlo) delante.

Dos estrellas de equipos rivales tienen que dirimir una jugada decisiva para el partido, ante la mirada de miles de personas en el campo y cientos de millones por televisión, una oportunidad, una jugada, que seguramente solo pase una vez en la vida.

Casillas no la paró por casualidad: midió los tiempos, la distancia, aguantó y porque es un campeón, llegó.

A medida que Iker se iba haciendo más grande Robben se iba haciendo más pequeño en el momento en el que los cracks se consagran. Como Ronaldo, como Zidane, como Rafa Nadal, como Michael Jordan.

Después llegó el 116, momento en el que una pequeña gran estrella, ya leyenda, tras insistir mucho con poco acierto pero sin esconderse jamás, encontraba por fin el camino a una victoria de equipo. Una victoria épica en un partido espectacular para cualquier aficionado.

Consiguiendo algo tan grande que todavía no hemos asimilado aunque se celebrase por todo lo alto (no podía ser de otra manera) durante dos días.

Este país amaba demasiado este deporte como para no estar en la lista de campeones.

Tras Eurocopa y Mundial hemos demostrado que España manda en este juego y este equipo ya es historia.

Lo conseguimos: el fútbol es nuestro.

5 comentarios:

  1. Fue realmente bonito, uno de los partidos más emocionantes que recuerdo, mención especial a los últimos 75 minutos.

    Estos son los momentos que no se deben desaprovechar, porque sólo se tienen estas generaciones cada mil años, y los nuestros lo aprovecharon, consiguiendo así un doblete tremendo con la eurocopa. Que bonito.

    Ahora a pensar en el futuro, hay razones y equipo para creer que dentro de 2 años al menos volveremos a ser de los favoritos en la eurocopa de Polonia y Ucrania. ¿A por el triplete?.

    Disfrutemos de esta selección, quien sabe cuando podremos volver a vivir esto.

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  2. vamos vamos vamos!!!! españa campeona!!

    de acuerdo con el análisis y sobre todo de acuerdo con las emociones. El momento del gol de Robben, xq así es como lo estaba viviendo yo, como el típico: "ya está aquí es donde la liamos", que salva casillas...buah tremendo, y cuando entra el de iniesta tb, cuando ya parecíamos avocados a unos peligrosos penaltis. Increíble. A pensar en el futuro como dice juan no, a disfrutar del presente y cdo dentro de dos años llegue la eurocopa pues ya veremos qué tenemos y si somos favoritos o no.


    Por cierto, dato, somos el único pais del mundo, al loro, en tener copa del mundo de basket y de fútbol y de hecho por tanto también el único en tener mundial y eurocopa de basket y fútbol

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  3. me desdigo, lo de campeones de ambas cosas es falso falso, me habían informado fuentes erróneas

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  4. bonito comienzo te ha regalado Emboscadas para tu blog. Espero que como agradecimiento te guardes ese post en el seguramente no saldria bien parado. Tengo que decir que puedo compartir muchas de tus opiniones al respecto, pero que una persona siempre tenga suerte... algo mas habrá. VIVA EMBOSCADAS!!!
    Ya pasadas las alegrias necesito verdades! jijiji

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  5. Mira si te has tirado tiempo celebrando que llega muy tarde este articulo.
    Del partido se puede decir poco distinto de lo que ya se ha dicho y lo mismo pasa con las emociones del mismo (aunque no decis nada de acojone en el momento de la roja que tenian que haberle mostrado a Puyol); solo dire que el planeamiento de Holanda me parecio logico (demasiado duro eso si), porque hizo lo que Suiza y ellos nos ganaron, y Del Bosque me parecio vergonzoso que esperase tanto para el ultimo cambio, que todos veiamos que era necesario, por si sacaba a marchena por si se metia un gol España; malas decisiones las de sacar a Pedro (no hizo nada) y Busquets (vaya truño de primera parte, no daba un pase a derechas) que parecian flanes sobre el campo, algo parecido le paso al arbitro tambien que deberia haber expulsado a 4 jugadores seguro.
    Por cierto: ¡VIVA ANDRES INIESTA! el mejor jugador del mundial

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